La Subsecretaria de salud mental, consumos problemáticos y violencias en el ámbito de la salud pública, Julieta Calmels, junto a su par de Políticas contra las violencias por razones de género del Ministerio de la Mujer, políticas de género y diversidad sexual bonaerense, Flavia Delmas, inauguraron hoy el segundo encuentro de debate y reflexión, bajo el título: “Hacia una salud mental con perspectiva de género”.

La construcción de abordajes “que no encubran los problemas sino que permitan poder verlos y abordarlos en sus particularidades”, fue uno de los ejes destacados por Julieta Calmels, quien señaló en este sentido que “las personas con padecimiento mental si son mujeres, generalmente tienen una doble estigmatización, una doble segregación, que presenta para nosotros el desafío de construir prácticas que vayan en un sentido contrario”.

Camino al Día de la salud mental que se conmemora cada 10 de Octubre, la Subsecretaria destacó además la voluntad del Ministerio de Salud para que la agenda bonaerense vinculada a la salud mental “comience a tener un relieve a partir del cual podamos instalar algunos debates necesarios para la construcción de un nuevo modelo de atención en salud mental para nuestra provincia”.

Flavia Delmas hizo hincapié por su parte en la posibilidad de “pensar durante estas jornadas los posibles dispositivos y articulaciones necesarias para atender de la mejor manera posible y pensando siempre en la salida saludable. Es importante preguntarse -agregó- cómo dar respuestas integrales, de cuidado y que fortalezcan a quienes acompañamos – mujeres, trans, travestis- en sus trayectos de vida, por una vida autónoma y sin violencias”.

La Subsecretaria del Ministerio de la Mujer expuso vía streaming también algunos indicadores a partir de su trabajo en torno a situaciones de violencias por razones de género adonde “el padecimiento mental siempre está presente. No hay violencia sin padecimiento mental”, afirmó.

En este sentido, Delmas dijo que en el caso de la línea 144 de atención a víctimas de violencia de género, son las mujeres de 50 años o más -apenas el 20% del total de llamados- quienes pueden manifestar que tienen algún trastorno vinculado a su salud mental, por lo que “recurren a ansiolíticos o se sienten deprimidas”. Mientras que en las cartas de llamada de mujeres que habían sufrido intento de femicidios aparecían con frecuencia “estados de alerta permanente, trastorno de sueño, irritabilidad, abandono de iniciativas, juicios críticos alterados”, entre otros.

A la importancia de hablar y trabajar sobre salud mental y género, la Subsecretaria del Ministerio de la Mujer, políticas de género y diversidad sexual bonaerense, dijo además que es necesario pensar en las violencias institucionales: “ahí es fundamental trabajar el tema de la escucha activa, empática, y comprometida, que busca con la otra persona la posibilidad de la salida, la importancia del bienestar, salir de la posición de víctima para transformarse en sujeto de derechos”, concluyó.

Carina Lavandeira, Directora Provincial contra las violencias en el ámbito de la salud pública, fue la encargada de coordinar el panel del día miércoles que contó con la participación de Macarena Sabín Paz, Coordinadora del Equipo de Salud Mental del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS); Roxana Amendolara, integrante de Programa de Abordaje de la violencia por razones de género en contextos de encierro del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad de la Nación; Ana Alli, integrante de la Red de psicologxs feministas y del Equipo Coordinador del Conversatorio sobre género, salud mental y consumos problemáticos del Hospital Nacional Laura Bonaparte; Carla Giuliano, Coordinadora del Programa Provincial de Implementación de políticas de género y diversidad sexual en salud del Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires; y Carlota Ramírez, Directora de Salud sexual y reproductiva de la cartera sanitaria bonaerense.

En el canal de YouTube de la Subsecretaría de Salud Mental (https://youtu.be/WCDvY6qdPVw) quedará disponible el panel de debate para retomar los cruces propuestos entre género, patriarcado y salud mental, las vulneraciones en el contexto manicomial por el hecho de ser mujeres, así como la impronta del movimiento de mujeres, feminismos y diversidad que logró instalar en la agenda pública de los gobiernos, la necesidad de garantizar asistencia y acompañamiento integral, sin necesidad de la institucionalización y la segregación, y respetando la voluntad de las personas.