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Asistente Salud Mental

    Hospitales bonaerenses construyen nuevas modalidades de acompañamiento para personas internadas por COVID-19 y sus familiares

    “Las recomendaciones son una herramienta de trabajo para que acompañen a los equipos de salud en su tarea cotidiana en los hospitales generales” afirmó la Subsecretaria Julieta Calmels, durante la presentación de una guía orientada al cuidado de personas internadas por COVID-19 y sus familiares realizada durante el conversatorio virtual “Acompañar en salud mental en tiempos de pandemia”.

    La iniciativa impulsada por la Subsecretaría de Salud Mental, Consumos problemáticos y Violencias en el ámbito de la salud pública, estuvo coordinada por Carina Lavandeira de la Dirección de violencia de género, y contó con la participación de Juan Riera -Director Provincial de Hospitales-, María Jaschek -Directora Ejecutiva del Hospital General de Agudos “Dr. Rodolfo Rossi”-, y Fabiana Rousseaux, Directora de Territorios clínicos de la Memoria.

    Con aportes específicos del Equipo Argentino de Antropología Forense, de docentes de distintas universidades públicas de la provincia de Buenos Aires, así como de equipos hospitalarios, esta batería de recomendaciones busca generar formas excepcionales para que las personas internadas en hospitales “puedan tener un acompañamiento, una ayuda y una presencia del Estado no solamente en su cuidado y atención biológica, sino también en otras dimensiones emocionales que hacen a su propio bienestar y a las relaciones con sus seres queridos”, describió Julieta Calmels.

    El documento, que ya se encuentra disponible en la web de la Subsecretaría, ofrece pautas de trabajo posible y contempla por ejemplo la posibilidad de incluir dispositivos electrónicos que puedan promover la comunicación entre las personas internadas en unidades de terapia intensiva y sus familiares; propone la constitución de equipos interdisciplinarios que aporten una mirada integral sobre la salud mental y el acompañamiento de las personas; e incorpora además un ítem específico en relación a la reconfiguración de un momento tan sensible como lo es la comunicación de los partes médicos.

    Dichas recomendaciones hacen además un énfasis especial para casos de fallecimiento de pacientes por COVID-19. “Nos parece muy importante en torno a lo que es posible -destacó Julieta Calmels- construir las formas más humanas de poder acompañar a los familiares, en condiciones tan raras y excepcionales, para pensar cuáles son los ritos posibles de sostener, con quiénes y de qué manera”.

    En este sentido, además, se incorpora el aspecto religioso para que aquellas personas que tengan o practiquen una fe o una religión, puedan ser acompañadas en su derecho a que esa dimensión con la que piensan, organizan y transitan su vida, pueda darse también en momentos de sufrimiento y dolor.

    Con reconocimientos al trabajo permanente emprendido desde marzo por los equipos de asistencia tanto de hospitales como de CPAs, comunidades terapéuticas y centros de día, la Subsecretaria destacó especialmente la labor de Aipann (Atención Integral para Niños y Niñas) que funciona en la órbita del Hospital Estevez, sitio donde la figura del cuidador o familiar acompañante cobra un sentido determinante en situaciones particulares como las internaciones en salud mental o por discapacidad, y que en instituciones como el Hospital Rossi se pusieron en marcha a partir de la pandemia, en determinadas condiciones y bajo determinadas pautas de cuidado, siempre que la dinámica y la realidad hospitalaria así lo permite.

    Finalmente, Julieta Calmels relató cómo en el marco de la estrategia desplegada por los Estados nacional y provincial para contener los efectos desatados por el coronavirus, fueron surgiendo “otros ámbitos de sufrimientos intensos y la necesidad de construir nuevos dispositivos de acompañamiento, con un aporte específico y valioso del ámbito de la salud mental”.

    Entre ellos se destacan: Equipos de acompañamiento y contención en hospitales para “Cuidar a los que cuidan”; líneas telefónicas de atención profesional para situaciones de urgencia; intervenciones comunitarias en el marco de los Operativos Detectar; e incorporación de voluntarias y voluntarios en salud mental a los Centro de Telemedicina de Covid-19 (CeTeC).