Saltar directamente al contenido.

PROGRAMA de

T.B.C (Tuberculosis)

Ministerio de Salud

Qué es la tuberculosis

La tuberculosis es una enfermedad infectocontagiosa, causada por una microbacteria denominada “Mycobacterium tuberculosis”, y conocida como “bacilo de Koch” en honor a su descubridor, Roberto Koch, en el año 1882.

Se trata de una enfermedad curable, de notificación obligatoria, prevenible y de tratamiento gratuito, que afecta a los pulmones pero también puede dañar otros órganos como ganglios, cerebro y columna vertebral. Es importante el diagnóstico temprano y realizar un tratamiento completo sin interrupciones.

Se contagia de persona a persona, a partir de las gotas cargadas de bacilos producidas por las personas enfermas al toser, estornudar o escupir. El contacto semanal de más de 30 horas, con una persona enferma, en un ambiente cerrado y poco ventilado, aumenta el riego de enfermar.

Entre los síntomas, se debe prestar atención a la tos con o sin catarro durante más de 15 días. Otros signos pueden ser la pérdida de peso, pérdida del apetito, fiebre alta -especialmente por las noches o vespertina-, debilidad y cansancio, sudoración nocturna y dolor de pecho.

Qué es la tuberculosis (Folleto para población)

  Algoritmo Tuberculosis

Diagnóstico

Examen del esputo (catarro) o baciloscopía: consiste en tomar muestras de la expectoración con la finalidad de observar en el microscopio la presencia de bacilos de Koch.

El cultivo del esputo: es una prueba más específica. Está indicada en personas que tienen sospecha de tuberculosis pero cuya baciloscopía resultó negativa o cuando, a pesar de recibir el tratamiento para la enfermedad, el cuadro clínico evoluciona desfavorablemente o tienen antecedentes previos o contacto con personas con tuberculosis resistente a tratamiento.

Tratamiento

El tratamiento es gratuito, y se realiza con pastillas que deben tomarse mínimo durante seis meses. Es importante no suspenderlo, salvo indicación médica, ya que si se dejan de tomar los medicamentos antes de lo previsto o no los toman en la forma correcta, los bacilos pueden sobrevivir y volverse más resistentes a ese tratamiento.

Si bien un enfermo de tuberculosis deja de transmitir la enfermedad a las pocas semanas de comenzar a tratarse, todavía no está curado, y por esa razón es sumamente importante no abandonar el tratamiento.

Prevención

  • Vacunación BCG, para niños recién nacidos, aplicada antes de salir de la maternidad. Previene las formas graves de tuberculosis en menores de 5 años;
  • Ventilar frecuentemente los ambientes, dejar entrar la luz natural;
  • Cubrirse la boca con el antebrazo al toser;
  • Mantener una alimentación adecuada y variada;
  • Fomentar que las personas con síntomas acudan a los servicios de salud para confirmar si tienen la enfermedad, e iniciar el tratamiento lo más inmediatamente posible;
  • Acompañar y ayudar al enfermo de tuberculosis a cumplir el tratamiento;
  • Asesorar a las personas sobre la importancia de hacerse los controles si estuvieron en contacto con el enfermo durante muchas horas.