La Organización Internacional del Trabajo (OIT) dijo el lunes que la pandemia de COVID-19 tuvo un impacto mucho mayor en el empleo, cuatro veces peor, que la crisis financiera de 2008.

Con motivo de la apertura online desde Ginebra de la reunión anual de los miembros del organismo especializado de Naciones Unidas, su director general Guy Ryder dijo que el COVID-19 había tenido un efecto “devastador” en el trabajo, comparando la pandemia con un “cataclismo”.

“La experiencia profesional de esta pandemia ha sido para algunos sinónimo de molestias, aburrimiento, estrés y frustración. Para otros, ha sido sinónimo de miedo, pobreza y supervivencia”, dijo.

La crisis de salud que se ha desatado durante 17 meses ha sumido a más de 100 millones de trabajadores adicionales en la pobreza, una situación vinculada a la disminución de las horas de trabajo y la evaporación de buenos empleos, según un informe reciente de la OIT.

El documento también muestra que se espera que unos 205 millones de personas estén desempleadas en 2022, mucho más que los 187 millones en 2019. Y el empleo no debería volver a su nivel anterior a la crisis sanitaria hasta 2023.

“En conjunto, es una crisis en el mundo del trabajo que es cuatro veces peor que la desencadenada por la crisis financiera de 2008”, dijo Ryder.

El jefe de la OIT también dijo que la recuperación económica sería desigual entre países en vista de las tendencias actuales, señalando en particular las desigualdades en la distribución de vacunas en el mundo y las diferencias nacionales en la capacidad presupuestaria.

También pidió acciones para evitar que el “largo COVID-19”, es decir, síntomas muy diversos que afectan desde hace meses a personas que han sido infectadas, “se arraiguen en el mundo laboral, haciéndolo más desigual, más injusto, menos resiliente, menos inclusiva y, en última instancia, menos sostenible. ”

La única agencia tripartita de la ONU, la OIT, reúne a representantes de gobiernos, empleadores y trabajadores de 187 estados miembros. Fundada en 1919, la organización tuvo que suspender su sesión anual el año pasado debido a la pandemia.

Este año la conferencia se dividió en dos partes. Del 7 al 19 de junio, más de 4.300 delegados se reúnen en línea para discutir la recuperación del COVID-19. La reunión continuará en noviembre-diciembre para discutir, entre otras cosas, las desigualdades y el aprendizaje permanente.

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