Profesionales advierten que luego de siete meses de esta situación, que además no ha sido apoyada por una red pública, el padecimiento psíquico se ha convertido en un gran problema social y el país no tendría los recursos psicológicos para abordar un nuevo bloqueo. Del mismo modo, sostienen que sin prevención y sin escucha, el nivel de malestar social destinado a empeorar y tener fuertes repercusiones en la sociedad y la salud de las personas, con el agregado de una economía dañada.

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