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DIRECCIÓN de

Prevención de VIH, ITS y Hepatitis Virales

Ministerio de Salud

VIH, ITS y Hepatitis Virales

¿Por qué es importante conocer y prevenir las Infecciones de Transmisión Sexual?

Las infecciones de transmisión sexual (ITS) son una de las causas principales de morbilidad en las personas sexualmente activas. Estas pueden desarrollar enfermedades leves o de larga duración que impactan de manera directa en la calidad de vida y la salud sexual y reproductiva de las personas.
Debemos tener en cuenta que todas las personas sexualmente activas se encuentran expuestas a contraer ITS por lo que resulta fundamental que realicemos los controles médicos y los análisis, mantener el calendario de vacunación al día y concurrir al centro de salud frente a signos que aparezcan en nuestro cuerpo.

VIH / SIDA

¿Qué es el VIH? ¿Cuál es la diferencia con el SIDA?

La palabra VIH corresponde a las siglas del Virus de la Inmunodeficiencia Humana, el cual provoca el deterioro progresivo del sistema de defensas del organismo, llamado sistema inmunitario. A medida que el virus avanza, va debilitando este sistema hasta que comienzan a aparecer las enfermedades que definen al SIDA (Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida). Estas enfermedades (infecciones o tumores) son denominadas “oportunistas”
Para que el VIH no evolucione hacia un cuadro de SIDA es fundamental realizar el diagnóstico a tiempo y comenzar el tratamiento correspondiente. Actualmente los tratamientos disponibles permiten que las personas que viven con VIH tengan una buena calidad y expectativa de vida.

¿Cómo se transmite el VIH?

Puede transmitirse a través de tres formas:
Durante relaciones sexuales vaginales, anales u orales sin preservativo o campo de latex. La transmisión ocurre por el contacto directo de las mucosas con fluidos sexuales –secreciones vaginales, semen o fluidos preseminales– o sangre.
A través de un contacto sanguíneo por materiales punzantes y/o cortantes: por compartir agujas, jeringas, instrumentos usados para perforar la piel –agujas de acupuntura, de tatuajes, piercings, etc.–, que no hayan sido previamente esterilizados.
De la persona gestante a su hijo/a durante el embarazo, el parto o la lactancia.

¿Cómo se puede prevenir?

  • Usando correctamente el preservativo (masculino o femenino) y/o campo de latex cuando mantengamos relaciones sexuales (vaginal, anal, oral). El preservativo impide la transmisión del VIH, otras infecciones de transmisión sexual y los embarazos no deseados.
  • Realizandonos el test de VIH que nos permite conocer nuestra situación serológica e incentivando a nuestra/s pareja/s sexual/es a realizarlo.
  • Conociendo el riesgo de exposición y el modo de cuidarnos para cada una de las prácticas sexuales que elegimos.
  • Utilizando siempre material estéril para la aplicación de inyecciones y evitando el uso compartido de jeringas, agujas y otros elementos perforadores de la piel.
  • Utilizando siempre instrumentos de un solo uso o estériles para perforar la piel (agujas de acupuntura, tatuajes o el piercing). No compartiendo cuchillas de afeitar ni cepillos de dientes.
  • Si estamos gestando y vivimos con VIH, hay tratamientos que reducen eficazmente el riesgo de transmisión del virus al futuro niño o niña durante el embarazo y parto. Es importante suspender la lactancia.

¿Cuáles son los signos y síntomas del VIH y el SIDA? ¿Cómo se diagnostica?

Los síntomas del VIH y del SIDA varían, según la etapa de la infección, pero lo más frecuente es que no provoque ninguno hasta que el sistema inmunitario esté comprometido. En este sentido, la única manera para saber si se convive con el virus del VIH es la realización de un test o análisis de sangre. Existen diferentes técnicas diagnósticas. Las pruebas convencionales, que se realizan en laboratorios a partir de una extracción de sangre y tardan unos días en arrojar el resultado; y las rápidas, que se realizan generalmente por punción digital y cuyo resultado se puede obtener en menos de 20 minutos. Todos los procesos diagnósticos de VIH disponibles brindan resultados confiables de manera muy rápida y sencilla.
El test de VIH es gratuito en cualquier espacio de salud público. Es voluntario, por lo que nadie puede obligarnos a realizarlo, y es confidencial, ya que el equipo de salud que lo realiza no puede revelar la práctica ni el resultado del mismo.
Cuando nos realizamos el test de VIH debemos recibir un asesoramiento previo y posterior al test en el cual nos brinden la información necesaria y contemplen nuestras consultas.
No es requisito presentar documento de identidad u orden médica para realizarse la prueba.

¿Dónde nos podemos realizar el test rápido en provincia de Buenos Aires?

Para cualquiera de los tipos de test debemos tener en cuenta el período ventana, el cual es el lapso de tiempo que transcurre desde que el virus entra al cuerpo hasta que se produce la cantidad de anticuerpos (que es lo que miden los test) necesaria para que las pruebas los puedan detectar.
Según qué tipo de prueba sea, el tiempo de periodo ventana es entre 15 días y un mes. Durante ese tiempo las pruebas van a dar negativas aunque se haya contraído el virus del VIH.

Mapa de Centros de Testeo Rápido de
Sífilis y VIH

¿El VIH/SIDA tiene tratamiento?

El tratamiento de la infección por el VIH se llama tratamiento antirretroviral (TARV) y constituye una medida que mejora significativamente la calidad de vida de las personas que viven con VIH, reduce la morbimortalidad asociada y limita la posibilidad de transmisión.
El TARV es una combinación de medicamentos que se debe tomar a diario. A todas las personas que viven con VIH se les recomienda el TARV, independientemente del estadío. Es fundamental que toda persona sea acompañada por el sistema de salud en sus expectativas, dudas, representaciones y temores particulares frente al inicio y durante todo el tratamiento del VIH, ya que la constancia en el mismo es la clave de su éxito.

¿Cuáles son los estudios que se utilizan para el seguimiento de la infección por VIH?

Además de análisis de sangre de rutina, se realizan carga viral y recuento de linfocitos CD4, los cuales brindan información sobre la respuesta al tratamiento antirretroviral y la necesidad de realizar modificaciones en el mismo.

Recuento de linfocitos CD4

Los linfocitos CD4 tienen un rol importante en combatir las infecciones. El virus VIH infecta estas células, haciendo que disminuyan en número, lo que hace que se esté más susceptible a tener diferentes infecciones. El tratamiento antirretroviral aumenta el recuento de Linfocitos CD4.

Carga Viral

La carga viral plasmática es la cantidad de virus que hay en plasma y se expresa como número de copias de ARN por mililitro o en log10. Cuando es alta, significa que hay más cantidad de virus VIH en el organismo, y que el sistema inmune es deficiente. El objetivo luego de iniciado el tratamiento antirretroviral es que la carga viral sea indetectable, lo que significa que la cantidad de virus es mínima.

¿El VIH/SIDA se puede curar?

El TARV no cura el VIH, pero los medicamentos contra el VIH ayudan a las personas que viven con VIH a llevar una vida más larga y sana, además de reducir también la posibilidad de transmisión.
Hoy por hoy, los tratamientos existentes permiten disminuir la cantidad de virus en sangre al punto de mantenerlo en forma indetectable, es decir, que los análisis no logran detectarlo. Sin embargo, esto no significa que el VIH no esté en el cuerpo; por lo cual se debe seguir en tratamiento ya que si se suspende, a los pocos días hay un aumento en la cantidad de virus.
Recientemente se ha descubierto que si una persona toma su tratamiento de manera correcta y mantiene la carga de virus indetectable por más de 6 meses, no transmite el virus por vía sexual. Por eso, si es Indetectable, es Intransmisible.
Es importante que sepas que:

  • Si se suspende el tratamiento, esta condición se anula.
  • I=I no se aplica a la transmisión por sangre o leche materna.
  • Para tomar la decisión de no usar protección durante las relaciones sexuales, es recomendable el acompañamiento y monitoreo médico.
  • La no transmisión vía sexual corresponde sólo al VIH, no a otras ITS.

¿Qué y cuáles son las Infecciones de Transmisión Sexual (ITS)?

Las Infecciones de Transmisión Sexual son infecciones que afectan a personas sexualmente activas y pueden ser causadas por bacterias, virus, hongos, parásitos y protozoos. En su mayoría no generan inmunidad una vez contraídas, por lo cual una persona puede contraer reiteradas veces una misma infección. Se transmiten por vía sexual, sanguínea, o por vía perinatal (de una persona gestante a su hijo/a durante el embarazo, el trabajo de parto, el parto o la lactancia).
Las más frecuentes en nuestro país son Sífilis, Herpes, Chlamydia, Gonorrea, HPV, Hepatitis B, entre otras.
Dada la frecuencia de ITS que se presentan de forma asintomática, es recomendable que en la consulta médica por otros motivos aprovechemos la posibilidad de realizar los test de VIH y sífilis.

¿Cómo se previenen las ITS?

Ejerciendo prácticas sexuales cuidadas a partir del uso de barreras (preservativo o barrera oral).
La Hepatitis B y HPV pueden prevenirse mediante la aplicación de una vacuna gratuita e incluida en el Calendario Nacional de Vacunación.
Es fundamental que realicemos los controles correspondientes durante la gestación (testeo de VIH, Sífilis, Hepatitis B), de modo de realizar un diagnóstico oportuno y comenzar el tratamiento correspondiente para evitar la transmisión al bebé.

¿Las ITS provocan síntomas?

No todas las ITS generan síntomas, por lo que resulta fundamental la prevención para evitar su transmisión.
Algunos síntomas frecuentes son: secreción genital, heridas o llagas en los genitales, verrugas, ardor al orinar, dolor en la parte inferior abdominal, picazón en los genitales externos.
En caso de notar cambios en el cuerpo es fundamental que nos acerquemos al centro de salud a consultar, y si tenemos relaciones sexuales – con una o más parejas- es importante que solicitemos al médico análisis de VIH, hepatitis y sifílis; y mantener el carnet de vacunación al día.

¿Las ITS se tratan? ¿Y se curan?

Algunas de ellas son fácilmente curables si se detectan y se tratan a tiempo, previniendo así consecuencias serias para la salud, como infertilidad, entre otras.

Hepatitis virales

Centros de Atención Médica de Hepatitis Virales

En el siguiente mapa pueden encontrarse los centros de atención médica especializados en hepatitis virales, para que ante la sospecha o diagnóstico de alguna hepatitis podamos concurrir al establecimiento más cercano. Allí podemos acceder a la atención médica con especialistas en hepatología e infectología, la realización de los test diagnósticos y el tratamiento correspondiente.
Mapa de Centros de Atención Médica de
Hepatitis Virales

¿Qué son las hepatitis virales y cuáles son?

Son infecciones producidas por virus que provocan la inflamación del hígado. Las hepatitis virales más frecuentes en nuestro país son la A, B y C. La A es de transmisión fecal oral, y la B y C de transmisión sexual, sanguínea y perinatal.

¿Cómo se previenen?

Para la Hepatitis A y B hay vacunas efectivas incorporadas al Calendario Nacional de Vacunación, las cuales son gratuitas y se pueden aplicar en centros de salud.
Otras maneras de prevención son mantener prácticas sexuales cuidadas (uso de preservativo, campo de latex), evitar el contacto con sangre, no compartir -o esterilizar en caso de hacerlo- elementos cortopunzantes y realizar los controles y análisis durante la gestación, para que en caso de ser necesario se comience oportunamente el tratamiento que evita la transmisión al niño/a.

¿Las hepatitis provocan síntomas?

Pueden ser asintomáticas, o presentar sintomas parecidos a los de la gripe, coloración amarilla en la piel (ictericia), náuseas o vómitos, orina de color oscuro, fiebre, dolor abdominal. En tanto pueden no provocar síntomas es recomendable que si tenemos relaciones sexuales, con una o más parejas, solicitemos al médico/a análisis de hepatitis, VIH, y sifílis y mantener el carnet de vacunación al día.

¿Las hepatitis se tratan? ¿Y se curan?

La mayoría de las veces la hepatitis B se resuelve sin tratamiento específico, pero de convertirse en una infección crónica hay tratamiento antiviral disponible.
Para la Hepatitis C hay tratamiento antiviral eficaz que llega a curar la infección en más del 90% de los casos.
La hepatitis A suele tener una resolución espontánea, aunque a veces puede producir infecciones agudas graves que llevan a la insuficiencia hepática, por lo que es esencial la vacunación en la infancia.